El problema de ser mujer es que en todas las culturas, en mayor o menor grado, existe la desigualdad y el machismo. En muchas ocasiones por el simple hecho de ser mujer se carga con el estigma de que lo que nos sucede es por nuestra culpa.
Cuando sales sola a la calle, más cuando es en de noche, es porque andamos buscando “algo”, que si se viste con ropa ajustada, escotada o con falda corta es porque de alguna forma se incita a los hombres a que cometan falta de respeto o en el peor de los casos violaciones o hasta feminicidios.
En el caso de las redes sociales también existe esta violencia, muchas veces algunas de las chicas que aceptan solicitudes de desconocidos son interceptadas por hombres que buscan otras intenciones, no hay que descartar a todos los que solo buscan pasar el rato y en el peor de los casos existen los tratantes de blancas que engañan a estas chicas para secuestrarlas y meterlas en la prostitución.
El caso de desapariciones ha incrementado a través del tiempo. En Puebla el caso es alarmante, aunque no es sólo este estado, pues hay 49 casos de desapariciones al mes en la entidad poblana. Es preocupante lo que sucede en el país, pues crece cada vez más cual pandemia.
Lamentablemente, y aunque no es exclusivo de México, las mujeres que viven alguna de estas situaciones siempre son víctimas dos veces, pues aparte de ser violentadas sexualmente o de manera verbal, son consideradas las culpables, ellas siempre tuvieron la culpa, ya sea por su forma de vestir, por salir solas o solo por ser confiadas.
Total que el machismo en el que vivimos siempre encontrará la forma de convertir a la mujer en la responsable de su desgracia.