En un indignante caso, agentes de la Policía Ministerial de Tamaulipas dispararon contra un vehículo Volkswagen Jetta blanco en la carretera Reynosa–San Fernando, confundiendo a una familia con presuntos delincuentes.
El trágico incidente, ocurrido el 4 de septiembre de 2025 en la colonia Carlos Cantú, dejó un menor de 7 años muerto tras recibir un disparo en la cabeza.
Su padre resultó herido con un rozón de bala en el rostro y su madre con dos impactos en el brazo.
Según el padre, los agentes no cesaron el fuego pese a sus intentos de señalar que no estaban armados.
Tras percatarse del error, los policías ofrecieron 120 mil pesos como compensación, desatando indignación en redes sociales.
La Fiscalía General de Justicia de Tamaulipas investiga el caso, pero el hermetismo oficial persiste al 5 de septiembre de 2025.
La ciudadanía exige justicia por esta tragedia.
La Vocería Tamaulipas, solo informó que había un menor fallecido y un hombre y una mujer no graves a sin dar mayores detalles