Esta semana un estudio del fondo de población de las Naciones Unidas informó que la crisis climática amenaza la vida de 41 millones de personas en las zonas costeras de baja altitud en Latinoamérica y el Caribe.
El informe revela con imágenes de satélite, datos geoespaciales y estimaciones de población que las regiones más expuestas a riesgos como la sequía, la desertificación, huracanes o tormentas o fenómenos meteorológicos extremos, que suelen traer como consecuencias inundaciones generalizadas, podrían afectar a las zonas costeras del Caribe y Latinoamérica.
Estos efectos causados por el cambio climático podrían afectar a 41 millones de personas según lo presentado, donde se busca que los países inviertan para reducir la desigualdad de su población y una mejor gestión de los recursos hídricos.