Primeras investigaciones de la masacre ocurrida en el municipio de Salvatierra, indican que el ataque ocurrió debido a que las víctimas no permitieron ingresar a un grupo de personas a la posada.
La investigación de la fiscalía general del estado de Guanajuato, señala que tras 35 entrevistas con testigos y sobrevivientes se ha establecido una hipótesis de lo sucedido, que revela una de las líneas de investigación podría ser que los participantes de la fiesta no dejaron entrar a otro grupo.
Las entrevistas señalan que el domingo por la madrugada, un grupo de personas llegó a la ex hacienda, donde los jóvenes convivían, los cuales al notar su presencia les pidieron que se retiraran de la zona.
Ante las insistencias el grupo se retiró, sin embargo regresaron acompañados por otro grupo de personas con armas de fuego, quienes comenzaron a disparar contra los presentes dejando un saldo de 11 personas muertas y 14 lesionadas.
Se destaca que en el lugar también fueron incendiados diversos vehículos que se encontraban en el estacionamiento, además que se tiene indicios que se dispararon al menos 195 casquillos de arma de fuego.
