La educación de la niñez en Tamaulipas desafortunadamente ha quedado en el olvido para los miembros de la Sección 30 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), al establecer un paro de actividades por tiempo indefinido en la mayoría de las escuelas.
Es necesario establecer la corresponsabilidad de la administración estatal morenista, en primer lugar por no detectar a tiempo y desactivar el grave problema con el magisterio, una seria falla de la Secretaría General de Gobierno, bajo el encargo de Héctor Joel Villegas González, a quien casualmente se le conoce como el “calabazo”.
Una vez más los intereses de unos cuantos, en este caso de los liderazgos sindicales bajo la responsabilidad de Arnulfo Rodríguez Treviño y las posturas soberbias y cerradas de los encargados de llevar a cabo las negociaciones, trascendió que dinamitaron los puentes de entendimiento antes de construirlos, afectan el bienestar de la mayoría.
¿El resultado? la educación de la niñez tamaulipeca entrampada. También ocasiona una serie de consecuencias sociales. Volver a pedir a los abuelos o a otras personas ayuden a cuidar a los hijos, pagar estancias o dejar solos en casa a los menores ante el riesgo que ello implica o delegar la supervisión a un dispositivo electrónico.
¿En realidad alguien puede creer que Alfonso Cepeda Salas, secretario general del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación, no conoce cada uno de los movimientos que realiza Rodríguez Treviño en su estructura educativa?. Es claro que está enterado de todo, de cada amague que se hace.
No es el primer encontronazo entre el líder magisterial, y el gobierno de Américo Villarreal Anaya, el marcador indica una ventaja a favor del primero, quien ganó las elecciones de la Secciòn 30 del SNTE a los candidatos oficiales Abelardo Ibarra Villanueva y a Naif Hamsho Ibarra, el 9 de diciembre del año pasado.
Todo parece indicar que Lucía Aimé Castillo Pastor, titular de la Secretaría de Educación Pública estatal, debe renunciar a su cargo y Arnulfo Rodríguez Treviño qué está dispuesto a ceder, porque algo tiene que entregar como muestra de buena voluntad.
En Tamaulipas nos empeñamos en mostrar como en antaño, a líderes sindicalizados intransigentes y de funcionarios estatales faltos de capacidad para gobernar y para hacer política, porque de eso se trata destrabar el conflicto con los maestros, ceder y lograr puntos de coincidencia, el presente de la niñez bien lo vale.
