Observatorio
Jueves 7 de septiembre, otro día sin clases en Tamaulipas, debido al conflicto creado por Arnulfo Rodríguez Treviño, secretario general de la sección 30 del Sindicato Nacional De Trabajadores de la Educación, (SNTE) en respuesta a una serie de demandas, que a su parecer y respaldado por la mayoría de los maestros agremiados, no han Sido resueltas.
Por un lado está el señalamiento de los maestros de una falta de voluntad por parte de las autoridades de la Secretaria de Educación Tamaulipas (SET) y en particular de la titular Lucía Aimé Castillo Pastor, para resolver o avanzar en la resolución de las peticiones que ya tienen años sin resolver.
Por el otro Castillo Pastor, leyó un comunicado en el que se enumeran de manera muy puntual una a una sus peticiones y las intenciones para resolverlas con resultados tangibles y señalando que siempre se les ha atendido, mencionando la cantidad de reuniones realizadas, desmintiendo la versión de la falta de voluntad de la autoridad.
Pero en el medio están los miles de alumnos de educación básica jardines de niños, primarias y secundarias de todo el estado, que se quedan sin clases en este incipiente ciclo escolar, que ya se antojaba complicado con la aplicación de la llamada Nueva Escuela Mexicana y los nuevos libros de texto.
Este es el momento en el que el Presidente de la República Andrés Manuel López Obrador, debiera intervenir con su clásica frase de «nada por la fuerza», respaldar al gobernador Américo Villarreal y ordenar que la situación sea tomada por la Secretaria de Educación Pública federal, atender a una comisión de maestros y que se levante el paro de labores.
Este es el momento en que se debe resolver esta crisis en Tamaulipas y evitar que lo relacionado a este gobierno escale en lo negativo, pues el presidente ya tiene una bronca en el interior de su partido que seguramente le va a permear hacia afuera, seguro que no quiere otra bronca más en un estado en el que habrá elecciones en el 2024.
Dejar claro que los conflictos se resuelven con el diálogo, logrando acuerdos, sin afectar a terceros, en este caso uno de los aspectos más importantes para nuestro país como es la educación y no darle fuerza a prácticas del pasado.
