En fila como las hormigas, de manera eficiente y segura niños de todas las edades, familias enteras entraron al graderío del Estadio “Alfonso Lastras Ramírez”, y uno a uno fueron tomando su lugar.
El sol a plomo en la primavera potosina; el domingo de resurrección tenía doble significado.
Allá abajo justamente a donde no llega la vista del respetable público: el incienso, las estampillas religiosas, hasta el marigüanol y el nerviosismo aromatizaron los vestidores de los equipos Villa de Arriaga y Genetíc, grandes finalistas de la Copa Potosi, autodenominada también por los mismos jugadores como la copa del millón por el decoroso premio al primer lugar.
Para San Luis Potosí los obstáculos y malos gobiernos del pasado han sido eliminados; el momento en que las calles potosinas habían sido arrebatadas quedó en fuera de lugar, hoy la comunidad siguió al líder hacia adelante; el capitán Gallardo logró resultados efectivos y en la unifila segura como un ejército de hormigas volvió a poner en alto el nombre de su estado, así Ricardo Gallardo Cardona como los equipos participantes en la Copa más competitiva del país en el periodo vacacional de Semana Santa 2023 dio la vuelta olímpica con la pura organización y su éxito deportivo.
El ídolo fuera de serie Cuauhtémoc Blanco Bravo, humilde como siempre llegó a las 15 horas con 37 minutos a la cancha del “Alfonso Lastras”, fotos; abrazos, recuerdos y hasta uno que otro reclamo de los aficionados chivas que al verlo volvieron a sentir ardor impedían que la leyenda viviente y el gobernador Ricardo Gallardo lograran instalarse para el silbatazo inicial.
La fiesta, en las gradas estaba a todo volumen, en el palco de transmisión un grupo de reporteros bailaba y alzaba las manos, el güiro hacia lo suyo y se adueñaba del torrente sanguíneo.
Los equipos Villa de Arriaga y Genetíc ya habían calentado y pisado el hermoso césped del estadio. Todo estaba listo, era la gran final de la copa del millón. Era la gran fiesta deportiva de un domingo de resurrección que vió el triunfo de un San Luis Potosí que dejó atrás la pandemia y sus jugadas violentas, hoy ya se nota la armonía, un ambiente de paz y bienestar.
Fue un partidazo, seis goles, vino de menos a más; el final fue más que emocionante. Genetíc metió 4 goles y Villa de Arriaga se regresó a casa con 2 a su favor, no le alcanzó para quedarse con el trofeo pero se llevó el corazón de la afición por su entrega dentro del terreno de juego, eran el equipo de la banda, del barrio, eran los elegidos del llano.
Poco menos de 100 mil asistentes en la fase de grupos y etapa eliminatoria, tan solo más de 10 mil se dieron cita para la gran final de la Copa Potosi, fue la más grande de la historia y de ese tamaño el reto para su edición 2024 porque Ricardo Gallardo, quiere que los chavos salgan de las calles y se involucren más en el deporte, así que desde ahora se comprometió a elevar el premio, mejorar la organización e impulsar el turismo deportivo con la Copa Potosí del siguiente año.
Por su parte el Cuauh, sí, el que es gobernador del estado de Morelos no se cansó de dar autógrafos, fotos, Selfies, incluso, desafió dos que tres reclamos porque es americanista desde la cuna y su presencia hace temblar a los rivales deportivos que no olvidan su magia, sus goles, su grandeza como azulcrema pero también recibió el amor de los potosinos que le aplaudieron su paso en la selección mexicana de fútbol.
Cuauhtémoc Blanco Bravo, el que comenzó en el llano y llegó a la gloria, esa misma satisfacción de vida por la que él trabaja para las juventudes morelenses y en este caso con su presencia en San Luis apoyando los sueños de los chavales potosinos junto a su colega y amigo Ricardo “Pollo” Gallardo, sin duda, el campeón de este torneo junto a Karla Hernández Sánchez y todo su equipo del INPODE que SEGURAmente va recibir sus aplausos y felicitaciones.
En la intimidad… Con una misa presidida por el Obispo José Armando Álvarez Cano, celebrada en la Iglesia Catedral, el municipio de Tampico dio inicio con las festividades por el Bicentenario de la ciudad.
El alcalde Chucho Nader, su esposa Aída Féres de Nader, presidenta del Sistema DIF Tampico, así como sus nietos, funcionarios del Gobierno Municipal y feligresía, participaron en la celebración del Domingo de Resurrección, en donde se resaltó también parte de la historia de Tampico desde su fundación en 1823 hasta nuestros días.
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