Tras los incendios forestales que han azotado Nuevo León, el gobierno del estado decidió dar castigo de hasta 10 años de cárcel a quien provoque fuego y dañe zonas forestales.
Desde 2 y hasta 10 años de cárcel sería la sanción dirigida a quien cause un incendio forestal, ya sea de manera intencional o imprudencial.
A su vez el gobierno informó que se prohibiría el uso de fogatas, la restricción del uso de vehículos todo terreno de tres o cuatro ruedas en zona de veda, así como también se reducirá el número de visitantes a los parajes naturales de Adjuntas, Matacanes, e Hidrofobia, o demás aledaños, ubicados en el municipio de Santiago.