Esta mañana el presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró que el gobierno mexicano, por medio de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), ha exigido una investigación de fondo para descartar que hayan sido asesinados por autoridades estadounidenses, los tres mexicanos que fueron encontrados muertos en un lote baldío en Phoenix, Arizona.
En su conferencia de prensa en palacio nacional, el presidente mexicano aclaró que el tema no fue tratado ayer en su reunión con Ken Salazar, embajador de Estados Unidos en México, si no que relaciones exteriores, encabezado por el secretario Marcelo Ebrard, ha llevado el caso desde hace unos días.
«Se está exigiendo una investigación de fondo para descartar que hayan sido torturados, asesinados por autoridades estadounidenses. Se está investigando”, dijo el presidente.
El caso ocurrió el pasado 20 de febrero cuando tres jóvenes indígenas originarios de Oaxaca fueron localizados con señales de tortura en un terreno baldío en Phoenix, Arizona.