La catedral metropolitana de la ciudad de México confesó no contar con recursos para alimentar a sus sacerdotes ni para cubrir el salario de los trabajadores debido a la crisis económica causada por el virus COVID-19.
La catedral capitalina, de nombre Asunción de María de México, se encuentra en el lado norte del Zócalo con una altura de 67 metros, fue construida poco después de la conquista española de la ciudad de Tenochtitlán, pero según informes de la arquidiócesis, aunque haya reducido la nómina hace meses, declaró que ya no cuenta con los recursos para alimentar a los sacerdotes ni para pagar las nóminas de los trabajadores de la iglesia, esto en consecuencia de la pandemia que ha afectado a casi todos los sectores de iglesias en el país.
Como búsqueda de rescatar la iglesia, la Universidad Anáhuac, la Universidad La Salle y la Universidad Panamericana, así como otros organismos, recaudaron donativos para poder dar mantenimiento a la catedral y pagar el sueldo de los empleados con la campaña “La catedral es de todos”, que busca juntar 600 mil pesos mensuales.