Por Carolina Infante Pacheco Cronista de Ciudad Madero
El 5 de febrero es una fecha muy importante para todos los mexicanos, el día que conmemoramos la promulgación de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos.
Pero también un 5 de febrero de1883, empezó a funcionar una de las obras más significativas y de suma importancia que el General Porfirio Díaz mandó construir y que gracias a ello, el puerto de Tampico y la región tuvo un fuerte impulso al comercio
Cita el Tomo II de “La huasteca tamaulipeca”, Joaquín Meade afirma que “en el primer tercio del siglo XVI, Nuño de Guzmán mandó a levantar una torre en La Barra, en la que ordenó se colocara un farol”, y que más de doscientos años después, en 1860, “se colocó una farola en un mástil de veinte metros que tendía don Teófilo Estrada”. De estos datos aportados por Meade, quizás el más relevante para la historia moderna (aquella que se registra a partir de 1823) sea el de “la farola” colocada 37 años después de la fundación del puerto. (ACIP)
La construcción de este primer Faro coincide precisamente con la aparición del uso del queroseno como combustible para alumbrado. Bueno, en realidad no fue coincidencia, palabra que concita lo azaroso. Para ser más precisos, habría que decir que el uso del queroseno como iluminante hizo factible la colocación del faro de 1860.
Antes de este año, se utilizaba para los mismos efectos el aceite de ballena, cuya “rareza y alto precio lo volvían accesible sólo para gente de caudal”. Todo indica, pues, que el bajo costo del combustible derivado del petróleo fue fundamental para la realización del tan necesario Faro.
Sin embargo, lo que fue nuevo en 1860, debió ser viejo, casi veinte años después. Alfonso Casados Florencia escribió que, en 1875, “un grupo de comerciantes, se dirigió al Gobierno del Centro solicitando la instalación de un nuevo faro para ubicarlo en La Barra, una señal de luz sumamente necesaria para la perfecta operación del puerto.
La respuesta no se hizo esperar por parte del señor ministro de Fomento, informando que ya se había ordenado la construcción del faro en Inglaterra, pero el tiempo pasó y no hubo más noticias al respecto.
Para fortuna de los comerciantes de la zona, el 3 de marzo de 1878 llegó, el ministro de Fomento, don Vicente Riva Palacio, precisamente para atender peticiones como avanzada en la campaña a la presidencia del General Porfirio Díaz Morí
Aunque los cronistas de la época no pormenorizan las solicitudes de los porteños, es muy probable que en dicha ocasión se le haya recordado a Riva Palacio el “pendiente” asunto del faro. Y debió ser así porque, un año después, un ingeniero de apellido Lavit “fue comisionado por la Secretaría de Fomento para estudiar cual era el mejor lugar para establecer una luz que fundiera como señal”
Según registra Torrea y Fuentes, quienes agregan: “Del estudio hecho por dicho ingeniero, se desprendió que los sitios preferibles eran el cerro de Andonegui, el cerro de Las Piedras y la llanura de La Barra, pero, aunque los dos primeros sitios se encontraban a 25 y 30 metros sobre el nivel del mar, fueron desechados debido a los obstáculos topográficos, ya que estaban a más de seis kilómetros de la desembocadura del río Pánuco, resultaba poco funcional por la lejanía a la playa, por este motivo se decidió la construcción del faro en la llanura de La Barra”. (CAIN)
Joaquín Meade cita la versión ofrecida por el marino Pedro H. Orozco, quien afirma que en 1878 “el pailebot Admiral Bool llevaba a bordo un faro para la Isla de Lobos”. La embarcación pasó por Tampico, siendo remolcada “a través de La Barra por el remolcador Iru. Agrega Orozco que, “al saber esto, el comercio local hizo gestiones para que dicho faro fuera redireccionado e instalado medicinado en la zona, como lo habían solicitado”. Esta versión ha sido aceptada por la mayoría de los cronistas, aunque Alfonso Casados considera correctamente que el faro destinado a la Isla de Lobos y que finalmente no se colocó, y que fue hasta 1882 cuando, “a bordo del buque guadafaros “Donato Guerra”, empezó a llegar el material para la torre (del faro de Tampico) y a fines de ese año llegó el aparato de tres destellos para ser instalado en La Barra”. Es conveniente anotar que este faro fue construido en 1879 “bajo la dirección e inspección el ingeniero civil don J. Ramón de Ibarrola en los talleres de la Kistones Briged Company, de Pittsburgh”, información proporcionada por el finado cronista de Ciudad Madero, don Eduardo Infante Álvarez.
Respecto al sitio en que se erigió la torre del faro, Torrea y Fuentes anotan que a estar éste “formado por terrenos arenosos de poca resistencia se hizo necesaria la ejecución de un pilotaje en la base, de forma hexagonal, y de 8.2 metros por lado, teniendo que gastarse en los cimientos la cuantiosa suma de 16 mil 500 pesos”.
La luz producida por este faro estaba compuesta de un grupo de tres destellos blancos cada segundo. Siendo un faro de segundo orden, tenía una intensidad luminosa de 36 unidades de 100 lámparas Cárcel. Su alcance luminoso en tiempo claro era de 55 millas marinas, y su alcance geográfico de 18 millas.
Como complemento del faro, en ambos extremos de las escolleras se establecieron balizas luminosas, que fueron destruidas después por los violentos vientos del norte. En su lugar se emplearon boyas luminosas, una en la escollera norte y otra en la sur”. Para el año de 1942, el servicio de enfilación de los barcos se hacía “por medio de dos luces situadas en tierra, en la margen izquierda del Pánuco”.
Aunque Joaquín Meade dice que el faro tiene cuarenta y tres metros de altura, don Renato Gutiérrez Zamora asegura que mide 45 metros “sobre la marea media”. Por su parte, Eduardo Infante coincide con Meade respecto a la altura del faro, y agrega que “es el más alto del país, de tierra hacia arriba”. Asimismo, nos dice que la zona de ascenso tiene 209 escalones, y que los reflejos de la luz, “en tiempo bueno, se pueden ver hasta Punta Pérez”.
Para terminar y ponderar lo importante de este tema es la fecha del 5 de febrero de 1883, donde días antes de quedar establecida la línea telegráfica entre Tampico y la Huasteca veracruzana, fue inaugurado el faro de La Barra, con la asistencia de diversas autoridades y gran número de comerciantes. Alfonso Casados asegura que “los destellos del faro llegaron a ser muy conocidos a raíz del auge petrolero que provocó la fiebre del oro negro, en la segunda década del siglo pasado”.
Fiel testigo mudo del nacimiento y crecimiento de Ciudad Madero, por ello en nuestro escudo de armas, ocupo uno de los apartados de nos llena de orgullo y nos da identidad a los maderenses.
Para una servidora, el Faro de la Barra representa más que una obra de ingeniería y un paso a la seguridad marítima, ya que nací y crecí a un lado del faro, haciendo uno de los lugares favoritos en mi infancia para jugar. Horas interminables de carreras por sus 209 escalones en la escalera de caracol, llegar hasta la lámpara y descansar en su cornisa, privilegiando la maravillosa vista donde podía contemplar la inmensidad del mar, el rio Pánuco y la refinería. Contemplar el cielo y adivinar figuras en las nubes, era de lo más grandilocuente. Pero, sobre todo, sentir la brisa en mi cara, aún recuerdo ese olor a playa impregnado en mi recuerdo.
Aguascalientes, Aguascalientes.- La delegación de Tamaulipas de paraatletismo continúa con una extraordinaria actuación en la Paralimpiada Nacional 2025, al sumar nuevas preseas durante el tercer día de competencia de la segunda etapa del evento. Con estos resultados supera ya las 90 medallas totales y se mantiene en la pelea por el Top-10 nacional. El director general del INDE Tamaulipas, Manuel Virués Lozano, informó que en esta jornada las y los deportistas tamaulipecos volvieron a destacar al conseguir importantes resultados, entre ellos cuatro medallas de oro que confirman el gran nivel competitivo de la delegación. Las preseas doradas fueron obtenidas por Gabriel Alejandro Avilés González, de Tampico, quien se coronó en los 200 metros F21 dentro de la categoría Juvenil Superior bajo la guía del entrenador Humberto del Toro; Fernanda del Ángel Laureano, de Altamira, campeona en los 200 metros T38 de la categoría Juvenil Superior, entrenada por Víctor Eduardo; Guadalupe González Flores, también de Tampico, quien logró el oro en lanzamiento de jabalina F11 en la categoría Juvenil Mayor, con dirección de la entrenadora Laura Promotor; y Cristian Bernardo Mendoza Álvarez, de Ciudad Victoria, quien se llevó el primer lugar en lanzamiento de bala F38 dentro de la categoría Juvenil Superior. Además, la delegación sumó varias medallas de bronce. Entre ellas, la obtenida por Jesús Lira Ramírez, de Ciudad Victoria, en impulso de bala F34 (Juvenil Superior) bajo las órdenes del entrenador Picazo; Evelyn Mendoza Pérez, de Tampico, en lanzamiento de jabalina F55/56 (Juvenil Mayor) con la entrenadora Lluvia Estrella; Carolina Ramírez Villegas, de Victoria, en impulso de bala F21 (Juvenil Superior) entrenada por Rosa Delia Díaz; y Lorena López Lizcano, de Tampico, quien también consiguió el bronce en impulso de bala F21 (Juvenil Mayor) con la dirección técnica de Lluvia Estrella. Virués Lozano, reconoció el esfuerzo, disciplina y entrega de los atletas y entrenadores que siguen dejando en alto el nombre del estado en la máxima justa nacional del deporte adaptado, reafirmando el compromiso de continuar impulsando el talento inclusivo y competitivo en todas las disciplinas como lo ha instruido el gobernador Américo Villarreal Anaya.
Agregó que durante este día continuará la actividad de las y los tamaulipecos en la que darán todo en la pista para seguir brillando en esta disciplina.
Altamira, Tamaulipas.– La Universidad Tecnológica de Altamira (UTALT) consolida su compromiso con la innovación y el impacto social al participar en el XXI Simposio Mexicano de Computación en Imágenes Médicas (MEXCAS 2025), celebrado en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM). Mara Grassiel Acosta González, rectora de la universidad, destacó que durante el simposio la UTALT presentó el proyecto “ArtNeuro-Communication Interface”, una interfaz de voz silenciosa que utiliza redes neuronales artificiales y modelos de lenguaje para crear un medio de comunicación alternativo y efectivo para personas que han perdido la capacidad del habla. Recordó que la gestación de este proyecto se dio en el marco de la convocatoria “Proyectos de Investigación en Inteligencia Artificial en el Espacio de Innovación UNAM-Huawei”, la cual facilitó a la UTALT, el acceso a infraestructura de cómputo de alto rendimiento. Reconoció que el éxito de este proyecto fue posible gracias a la dedicación de los estudiantes Luis Rael Cabrera Almazán, Edgar Alejandro Hernández Vázquez y Miguel Villela Venegas, guiados por la asesoría experta del Dr. Diego Arturo Soto Monterrubio, el Mtro. José Antonio Rodríguez Ahumada y el Mtro. Abel Salas Leal, docentes de la universidad. Puntualizó que al participar en iniciativas que promueven la inclusión y la aplicación tecnológica al servicio de la salud, la UTALT no solo eleva su perfil institucional, sino que cumple con la misión de ser un agente de cambio positivo en la sociedad tamaulipeca. Resaltó que este tipo de logros académicos y de investigación reflejan el talento, la dedicación y el compromiso social de la comunidad universitaria, así como el impulso que brindan el gobernador Américo Villarreal Anaya y el secretario de Educación, Miguel Ángel Valdez García, a la educación superior, fomentando una visión educativa orientada a la tecnología, la inclusión y la solución de problemas reales.
Reynosa, Tamaulipas.– Héctor David Palacios Regalado, estudiante del plantel CONALEP Reynosa, obtuvo el décimo lugar mundial en el prestigioso Microsoft Office Specialist (MOS) World Championship 2025, celebrado en Orlando, Florida, informó su director general, Fernando Arizpe Pedraza. Explicó que la edición número 23 de este campeonato mundial reunió a 190 de los mejores estudiantes de entre 13 y 22 años, provenientes de más de 80 países, donde Héctor David compitió en la categoría de Excel (Office 2019), destacándose como el único representante mexicano en el Top 10 global. Compartió que, durante la competencia final, los participantes debieron resolver un examen avanzado que ponía a prueba su dominio técnico y creatividad, diseñando materiales para Limbitless Solutions, una organización sin fines de lucro que fabrica prótesis biónicas. En este desafío, el estudiante tamaulipeco demostró su capacidad para aplicar sus conocimientos en proyectos con impacto social real.
Refirió que este triunfo también fue celebrado por el gobernador Américo Villarreal Anaya y el secretario de Educación, Miguel Ángel Valdez García, quienes han impulsado políticas públicas para fortalecer la educación técnica en el estado y han reconocido el valor de las certificaciones internacionales como herramientas que transforman el futuro profesional de las y los jóvenes tamaulipecos. Subrayó que la participación de Héctor David en este certamen, se da en el marco del impulso que CONALEP Tamaulipas ha dado a la obtención de certificaciones internacionales, como parte esencial de la formación de sus estudiantes, brindándoles herramientas concretas para competir en un entorno laboral cada vez más globalizado y digital.
Asunción, Paraguay.– Con el proyecto “XocolHTA”, la estudiante Keily Flores Pantoja, de la Escuela Secundaria Técnica No. 1 “Álvaro Obregón” de Ciudad Victoria, brilló en la Feria de Ciencias CIENCAP 2025, celebrada del 6 al 10 de octubre en Paraguay, al ganar la Medalla de Oro en el área de Medicina y Salud. Julio Martínez Burnes, director general del Consejo Tamaulipeco de Ciencia y Tecnología (COTACYT), explicó que el proyecto de Keily tiene como propósito el desarrollo de un producto nutracéutico auxiliar en el control de la hipertensión arterial, orientado a prevenir complicaciones graves como paros cardiacos o derrames cerebrales, mediante el aprovechamiento de componentes naturales del cacao. Indicó que la alumna contó con la asesoría de la Mtra. María de los Ángeles Robledo Aria, y precisó que “XocolHTA” obtuvo su acreditación internacional tras destacar en la ExpoCiencias Nacional 2024, realizada en diciembre del año pasado en Villahermosa, Tabasco, donde representó a Tamaulipas entre los mejores proyectos científicos juveniles del país. Resaltó que este éxito internacional reafirma el talento, la creatividad y la vocación científica de la juventud tamaulipeca, así como el compromiso del personal docente de la entidad por fomentar la investigación y la innovación desde los primeros niveles educativos. Subrayó que este logro también fue posible gracias al respaldo del Gobierno del Estado de Tamaulipas y de la Secretaría de Educación de Tamaulipas, que, bajo el liderazgo de Américo Villarreal Anaya y Miguel Ángel Valdez García, respectivamente, y a través del Programa de Formación de Capital Humano del COTACYT, impulsan la participación de estudiantes en escenarios nacionales e internacionales, fortaleciendo la formación científica y tecnológica con impacto social, y posicionando a Tamaulipas como un referente en ciencia, tecnología e innovación.