El estadio lució pletórico con los colores verde, blanco y rojo de la bandera de México; la pirotecnia iluminó el cielo oscuro y lúgubre por el Coronavirus. La pandemia debió tener las gradas vacías, pero no fue así.
La música, el baile y el hueso han desbordado la euforia de la multitud. Suenan las corcholatas de la cerveza y el crujir de los chicharrones de res hasta tienen ritmo de amenaza.
No cabe un alfiler en el graderío, todos están con la boca seca, piden tequilas para limpiar la garganta. Comenzó la tercera entrada.
Se trata del campeonato por la presidencia, el gran trofeo del 2024; sin embargo, los equipos deben pasar la postemporada del 2021 para seguir avanzando hasta las divisionales. El segundo informe del Gobierno Federal fue el grito de Plaaaay baaaall.
Morena juega de local con todo a favor y el equipo panista está de visita.
Los abucheos en el estadio de la política nacional son ahora representados por publicaciones mediáticas en medios de comunicación electrónicos y redes sociales contra los adversarios de la Cuarta Transformación.
El bateador en turno es uno de los gobernadores rebeldes. Se trata del integrante del equipo conservador blanquiazul, Francisco Javier García Cabeza de Vaca, gobernador de Tamaulipas, que enfrenta una nueva guerra; pero esta vez sin el uso de las armas.
El bateador se prepara, toma el bat y pisa con la derecha la almohadilla; en la grada sus seguidores sacan el dibujo de una cabeza de vaca que aparece en los emoji del Whatsapp y mensajerías instantáneas. Los contrarios silban, quieren distraerlo, le lanzan de todo, menos la cheve, está muy cara en el estadio, esa no es gratis como el frijol con gorgojo que daban los del equipo tricolor.
Y justo cuando suena el último cuetón de la fiesta del 210 Aniversario del Grito de Independencia, el estadio enmudece, no se escucha ni un grillo; pero a lo lejos, allá por la ala izquierda del estadio, sale una cartulina color marrón que acusa al gobernador panista de tener nexos con Joaquín Archivaldo Guzmán Loera.
Es justamente el día de su cumpleaños, con toda su fuerza pisa la base de home, Cabeza de Vaca, aprieta los dientes, se queda callado.
Tomó con fuerza el bate y giró a rajatabla… todo su cuerpo a la derecha, se escuchó el “clac”, ese temeroso escándalo auditivo que registra el impacto del bat con la pelota.
Cabeza de Vaca, pisa y corre… doña blanca hoy cocida con hilos naranjas y amarillos… se va, se va, se va, se fue.
El gobernador se voló la barda el día de su cumpleaños; el toletazo puso de pie a la experimentada coach de pitcheo Olga María del Carmen Sánchez Cordero Dávila, quien en su libreta de apuntes y pese a la solidez de su equipo como titular de la Secretaría de Gobernación (SEGOB), tuiteo sin miramientos en medio del huracán de agravios contra el bateador.
“Felicito al gobernador de Tamaulipas, @fgcabezadevaca, por su cumpleaños. Deseo que celebre este día en compañía de sus seres queridos y siga sumando su trabajo al México de todas y todos.”, publicó, la exministra y primera mujer en la historia de la nación en ocupar tan distinguido cargo en un mundo político de inexistente equidad.
Aún faltan entradas por jugar, extrainnings por venir pero el récord del estadio indicó que la pelota salió volando justo a las 11 horas (1+1= 2) con 13 minutos (1+3= 4), una ecuación numérica que dibuja el (24), como numeral final en el tablero tuitero de la coach de pitcheo; momento histórico en que el tamaulipeco recibió la felicitación vía twitter del Gobierno Centralista.
No se arrugó la coach; para ese aplauso, seguro el manager le hizo un guiño de complicidad y por segundo año consecutivo, mediante Olga Sánchez Cordero, sin darle importancia a las críticas felicitó al bateador panista que recibió la bendición en El Vaticano.
Francisco Javier García Cabeza de Vaca, “El roba bases” o “Cerbero”, ya jugó en las ligas menores como primera base en la alcaldía de Reynosa, y también fue integrante del equipo blanquiazul en la Cámara de Diputados; “bateador de fuego” en su paso como Diputado local, y coordinador de coaches en el Senado de la República, desde donde se ganó la distinción de bateador designado para el estado de Tamaulipas.
Este 17 de septiembre cumplió 53 años de edad, los celebró dándole RT a los mensajes recibidos por sus amigos, aliados, compinches y uno que otro despistado.
Con doña blanca lejos de la furia morenista, Cabeza de Vaca, tendrá en su momento un nuevo turno al bat.
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@dect1608
