Chilpancingo.- Desde hace dos meses la Coordinadora de Autoridades Comunitarias (CRAC) adiestran a niños de entre 6 y 15 años para defenderse contra los ataques del grupo delictivo «Los Ardillos», señalados como los autores del asesinato de diez músicos en Mexcalcingo.
El día de ayer, integrantes de la CRAC marcharon en la
comunidad de Alcozacán, (de donde eran originarios los músicos asesinados),
participando en la marcha 19 niños portando escopetas, todos ellos originarios
de las comunidades Ayahualtempa, José Joaquín Herrera, y de Xochitempa en el
municipio de Chilapa.
Bernardino Sánchez Luna, coordinador de la CRAC indicó
que los menores están siendo entrenados desde hace dos meses para defenderse en
caso de ser atacados por la organización criminal de Los Ardillos, pero no
harán funciones de policías comunitarios.
Indicó que decidieron entrenar a los pequeños, debido a que ni el Ejército, ni la Guardia Nacional, ni la Policía Estatal han podido detener los ataques que sufre la población desde hace cuatro años por parte de «Los Ardillos», y que ha costado la vida de decenas de personas.
Sánchez Luna expresó: «No vienen los maestros, no pueden ir a la escuela, entonces los niños se ven obligados a tomar las armas, los más grandecitos ya cargan pistolas .22, escopetas para poderse defender, porque resulta que a veces los quieren secuestrar»
«Le pedimos al gobierno de AMLO que nos hagan caso y que el bloqueo no lo vamos a levantar hasta que venga el presidente»
«Los enseñamos a defenderse, porque tenemos comprobado que los delincuentes si llevas armas no se meten contigo, pero si no llevas arma, te agarran como puerquito, te amarran y te llevan»
Por su parte Jorge Zuriel de los Santos Barrilla, fiscal general del estado indicó que seis integrantes de «Los Ardillos» son los presuntos responsables del asesinato de los diez músicos encontrados la tarde del pasado viernes en la carretera José Joaquín Herrera-Chilapa.
Explicó que los músicos regresaban después de haber
tocado un día antes en la comunidad de Tlayelpa, cuando fueron interceptados
por los criminales quienes dispararon al aire para que se detuvieran, después
los asesinaron con armas punzocortantes, algunos de ellos decapitados.
Los 10 cuerpos fueron subidos a dos camionetas, las cuales
fueron rociadas con gasolina para prenderles fuego.
Autoridades encontraron una de las camionetas en una
barranca aproximadamente a 100 metros de profundidad.
Con información de: El Universal