El Tratado de libre comercio de América del Norte (TLCAN), nos demostró con el paso de los años que paradójicamente ha fortalecido las fronteras territoriales y económicas de nuestros grandes vecinos, los Estados Unidos de América, obteniendo un control más efectivo sobre las mercancías; ya no digamos de personas.
Obviamente dicho TLCAN, polémico desde sus inicios, genera una competitividad subjetiva para el sector empresarial y de innovación en México.
Por eso y otros motivos, en el Senado Mexicano, un tal Ismael García Cabeza de Vaca, propone una reforma a la Ley de Impuesto al Valor Agregado para establecer una tasa de 8 por ciento de IVA en la frontera norte, debido a la pérdida de competitividad y la falta de beneficios para las empresas y la población en general.
Con esta iniciativa, el impuesto pasaría de 16 a 8 por ciento de manera directa, y eliminaría las limitaciones del Decreto de Estímulos Fiscales para la Región Fronteriza Norte, que, si bien bajó el IVA a 8 por ciento y el ISR a 20, tiene un truquillo, pues se basa en la temporalidad a dos años, y no previó que los insumos se adquieren a una tasa de 16 por ciento o en el exterior de esa franja territorial.
Resulta que en tribuna, el senador por Tamaulipas, dicho sea de paso afiliado al Partido Acción Nacional, dijo que el resultado de los estímulos fiscales ha sido un fracaso frente a las expectativas que generó debido a la complejidad, incertidumbre y discriminación de su naturaleza.
El susodicho, nacido en Reynosa, Tam., subrayó qje el crecimiento económico es el resultado de reglas claras para invertir, de ahí que promueva esta iniciativa de nueva cuenta -es decir, otra vez- a fin de revertir el incremento en el IVA en la frontera para quedar en un 8 por ciento y, sobre todo, plasmado en la Ley.
A la fecha, el Decreto propuesto por el Ejecutivo Federal en ningún sentido ha hecho la devolución oportuna del impuesto, la incorporación certera de las empresas, o mostrado resultados sustantivos que impulsen el crecimiento económico de la región fronteriza norte.
Otro punto que destaca el hermano del gobernador tamaulipeco, Francisco Javier García Cabeza de Vaca, va en relación a la miscelánea fiscal de 2019, pues vino a diezmar el Decreto de Estímulos Fiscales para la Región Fronteriza Norte, eliminando la compensación universal a los contribuyentes, y solo dejó libre la solicitud de devolución de IVA para tener un saldo a favor, trámite que demora hasta 10 meses.
Los estímulos actuales han dejado fuera a las empresas con buenas prácticas que obtienen otros beneficios mediante la contratación de personas con alguna discapacidad y adultos mayores.
Tampoco se hicieron merecedoras del IVA al 8 por ciento las actividades agrícolas y ganaderas, lo mismo que la industria maquiladora, preponderantes en Tamaulipas.
Ismael «zumba» García Cabeza de Vaca, cuenta que a más de cinco años del incremento del 11 al 16 por ciento en la tasa del IVA en la región fronteriza, la falta de voluntad política no ha permitido revertir esta medida que mantiene a la población de la frontera en una seria desventaja.
Ojalá que esto proceda…
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