Una comunidad en Estados Unidos formó una cadena humana para
tratar de ayudar a dos migrantes que se refugiaban de un agente del ICE.
El agente del Servicio de Control de Inmigración y Aduanas
(ICE) bloqueó, en Nashville, el paso a una camioneta, en el estacionamiento de
un hombre y su hijo migrantes, con el fin de arrestarlos. Los individuos se
negaron a bajar de la camioneta por temor a la detención, ya que el agente de
ICE se mantuvo a una distancia prudente pero eficaz para detenerlo, si estos decidían
bajar del vehículo.
Los vecinos comenzaron apoyando brindando agua, víveres y
gas a la familia que tuvo que quedarse dentro del vehículo, pero después de
algunas horas de que los migrantes estuvieran encerrados, los vecinos
decidieron formar una cadena humana para proteger al padre e hijo mientras
corrían al interior de la casa.
Al ser cuestionados de por qué habían colaborado a evitar la
detención de la familia, los vecinos declararon que no hubieran evitado el
hecho si supieran que las personas son criminales malos, dicen que la familia
no molesta a nadie y que trabajan todos los días.