Azul Yarrington

David Castellanos Terán
Alfonso Romo, jefe de la oficina del Gobierno de México, casualmente vestía una camiseta azul, pero no era un azul cualquiera; era en realidad un tono tipo “azul Yarrington”, bautizado de tal manera desde el caliente noreste mexicano en honor al ex gobernador de Tamaulipas, Tomás Jesús Yarrington Ruvalcaba, que durante su sexenio (1999-2005), siempre o casi siempre vistió el mismo color en sus camisas. Hoy Tomás Jesús, (según) está preso, y Romo Garza, vestido así durante la reunión con el jefe del ejecutivo estatal tamaulipeco Francisco Javier García Cabeza de Vaca, parece un panista inmerso en la Cuarta Transformación.

En dos reducidos mensajes de Twitter cargados de asignatura política, este martes el actual Presidente de la Asamblea de Gobernadores de Acción Nacional (GOAN), García Cabeza de Vaca, informó sobre la reunión sostenida con Alfonso Romo Garza, el hombre que le abrió camino al ahora presidente Andrés Manuel López Obrador, con los empresarios y adinerados de Tamaulipas allá por abril de 2017, ya cuando Francisco Javier García, llevaba siete meses al comando estatal. En aquel primer cuatrimestre del año, Alfonso Romo, estaba acompañado de Eugenio Nájera Solórzano, y se habían reunido en el sur tamaulipeco para comentar que el entonces aspirante López Obrador, no significaba un peligro para México, ni para sus inversiones, y que mucho menos sería una marioneta de los Estados Unidos de América.

Los mensajes en el microblogging de Cabeza de Vaca, son muy claros: “En la #CDMX sostuve una reunión de trabajo con el Jefe de la Oficina de @GobiernoMX, Alfonso Romo Garza, en la que abordamos el tema migratorio y la importancia de coordinar acciones con los gobernadores fronterizos. #Tamaulipas”

Pero en lo privado, Cabeza de Vaca, habría planteado la necesidad de que en los próximos días se realice una reunión con el secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard Casaubón, para conocer los alcances de la estrategia y cómo van a coadyuvar los gobiernos estatales en el tema de la migración; es más que normal y atinada, ya lo habíamos dicho, muchas preguntas y pocas respuestas por parte del gobierno federal.

Pero en el segundo tuit del día, el gobernador tamaulipeco, subrayó el encuentro con el regiomontano que vistió de azul Yarrington y se le recuerda con ese tinte salinista:  “En la reunión de trabajo en la #CDMX con el Jefe de la Oficina de @GobiernoMX, Alfonso Romo, analizamos diversos proyectos de inversión para #Tamaulipas en materia energética.”

En “materia energética”, escribió, ese es el tema que maneja a la perfección el mandatario, un rubro que viene perfeccionando desde el sexenio pasado,  un algo que opera incluso como un discurso de seguridad nacional, adelantándose  a lo que se podría convertir en la segunda amenaza de Donald Trump, luego de los aranceles, de los migrantes y es que la dependencia de México importando el 85 por ciento del gas que se utiliza para el suministro de la nación es pagado a Estados Unidos, pero proveniente del vecino estado de Texas, le digo, un asunto clasificado por Cabeza de Vaca como un tema de seguridad nacional, pues no existe la certeza de que el gobierno norteamericano modifique sus políticas y deje sin gas a todo el país.

El desabasto de gasolina fue una caricatura; el flujo migratorio es algo que se puede “arreglar” cerrándoles el paso, pero la falta la gas, eso dicho por el gobernador, será una gravedad no solo para los estados fronterizos, sino para todo México.

A todo esto, Cabeza de Vaca, cerró su gira de trabajo por la Ciudad de México con su participación en la presentación del Plan de Trabajo de la Comisión de Energía del Consejo Coordinador Empresarial, organismo que presumió el mandatario reconoce el papel nacional e internacional que juega #Tamaulipas en el sector energético nacional y del mundo.