Un suicida causó la muerte de 10 personas, e hirió a 20 más en Pakistán, en un ataque contra las fuerzas de seguridad que custodiaban el santuario sufí en Lahore.
El lugar, que custodia la tumba de Ali Hajveri, era visitado por cientos de peregrinos tanto dentro como fuera del santuario, que ya había sido objeto de ataques suicidas con docenas de muertos y heridos en el 2010.
La autoría del ataque fue por parte del grupo Hizbul Ahrar, una filial de los talibanes en Pakistán, el grupo ha realizado ataques similares durante años a esta ciudad.
Fuente: Excélsior