El Museo Británico dio a conocer una litografía en blanco
y negro del famoso cuadro “El Grito” de Edvard Munch, en la cual se lee la
inscripción “Sentí un gran grito en toda la naturaleza”, cayendo así la versión
de que la figura central está gritando pues con ello se lee que en realidad la
figura es quien escucha el grito.
Giulia Bartrum, curadora de la exposición dedicada a
Munch, indicó al Diario The Telegraph, que en la rara versión de “El Grito” que
se está exhibiendo se deja en claro que representa a una persona que escucha un
grito y no, como se ha debatido en muchas ocasiones, a una que está gritando.
El ex director del Museo Munch de Oslo, Gunnar Soerensen,
indicó que podía ser un grito en la naturaleza o una persona que grita, es solo
cuestión de interpretación, mientras que su sucesor Stein Olav Hernichsen
afirmó “tenemos las propias palabras de Munch y esta es una persona que se
cubre los oídos mientras escuchan los gritos de la naturaleza”.
Existen otras versiones en la su que aseguran que Munch
se inspiró para pintar el fondo del cuadro en una puesta de sol volcánica,
después de la erupción de Krakatua en 1883, o que refleja nubes estratosféricas
polares, fenómeno meteorológico en el sur de Noruega durante el invierno, por
lo que en ambos casos podría tratarse del grito de la naturaleza.