Algunos miembros de la Guardia Nacional de Estados Unidos comenzaron a llegar a la frontera con México mientras funcionarios del gobierno federal siguen discutiendo qué pueden hacer con respecto a la inmigración ilegal.
Los gobernadores republicanos de Texas, Arizona y Nuevo México se comprometieron el lunes a enviar a 1,600 miembros de la Guardia Nacional a la frontera, concediendo al presidente Donald Trump parte del contingente que pidió para luchar contra lo que considera es una crisis de llegadas de migrantes y delitos.
El único estado fronterizo que no dio un paso adelante fue California, gobernado por el demócrata Jerry Brown, que no anunció aún si la Guardia Nacional estatal participará en la campaña y que se ha enfrentado en repetidas ocasiones con Trump por su política migratoria.
Trump dijo la semana pasada que quiere enviar entre 2,000 y 4,000 miembros de la Guardia Nacional a la frontera con México, debido “al desgobierno que continúa en nuestra frontera sur”.
Fuente El País.