William Bando, administrador de la región de Tierras Altas, señaló al diario local “The Post Courier” que al menos 13 personas perdieron la vida en Mendi, capital de la provincia del Sur de las Tierras Altas, y otras 18 en las pedanías de Kutuku y Bosave.
Un equipo del gobierno sobrevolará la zona el día de hoy para reconocer mejor el impacto del desastre natural, debido a la escarpada orografía de la región y a la dificultad de acceso por tierra.
El sismo, de 7,5 grados, dejó varias regiones sin luz y las comunicaciones telefónicas no están disponibles, además de dejar daños considerables en propiedades e infraestructuras.
Cerca de 400.000 personas se vieron afectadas tras el movimiento telúrico y sus réplicas.
Fuente: El País.