El América volvió a regalar una noche redonda a su afición en el Estadio Azteca, con un triunfo contundente de 4-1 sobre Morelia, mismo que lo coloca de manera momentánea en el liderato general de la Liga MX.
Muy temprano el partido Cecilio Domínguez abrió el marcador para que el América navegara con tranquilidad hacia otra victoria. Así fue en el resultado final; sin embargo, tras el primer gol del partido,las Águilas cayeron en un letargo, mientras los visitantes comenzaron a tomar confianza sobre la cancha y a encimar al rival.
Una serie de tiros de esquina fueron el aviso para lo que más adelante sucedió: el empate por parte de Monarcas, gracias al tanto de Ángel Sepúlveda que dio la esperanza de un mejor resultado para los purépechas.
Pero, en una noche en la cual se esperaba que la figura fuera el francés Jérémy Ménez, quien por primera vez apareció como titular, emergió la figura de Mateus Uribe con dos goles que enmendaron el triunfo americanista.
El primero de ellos fue un portento de gol, desde el costado derecho recortó hacia el centro y sacó potente disparo que fue imposible para el portero Sebastián Sosa. Más adelante, el mismo Mateus tomó un balón que quedó en el área para empujar el esférico a las redes y marcar el tercero para los locales.
La tranquilidad volvió para la afición del equipo de Coapa, que despidió a Ménez entre aplausos cuando se fue de cambio por Darwin Quintero que entró abucheado. El francés no aprovechó sus minutos, pero Oribe Peralta sí. El cariño que se ha ganado el Cepillo está intacto. Un sector de la tribuna empezó a pedir el ingreso del delantero mexicano y el entrenador, Miguel Herrera, concedió.
Ya en la cancha, Oribe aprovechó la primera jugada de gol que tuvo para convertir el 4-1: un centro por derecha que el delantero mexicano cabeceó para sentenciar una noche redonda que pone al América en lo más alto de la liga.