Luego de la confirmación por parte de Apple de que las actualizaciones de software ralentizan el rendimiento de los modelos anteriores, cientos de demandas han llegado en contra de la compañía creada por Steve Jobs.
Los primeros en demandar a la empresa han sido dos grupos de consumidores en Estados Unidos, que han llevado el caso ante las cortes federales de Chicago y Los Ángeles.
El grupo de Chicago afirma que la limitación de la velocidad de los iPhone 5, iPhone 6 y algunos iPhone 7 se ha llevado a cabo “intencionalmente” para ‘orillar’ a los clientes a comprar los modelos más nuevos, como el más reciente iPhone X, que ha tenido malas ventas por su elevado precio de 1.000 dólares.
La segunda de las demandas afirma que, con esta práctica, Apple viola un contrato implícito por el que la compañía no debe interferir con el uso o la velocidad de sus dispositivos una vez se ha realizado la compra por parte del usuario final, por lo que piden se les indemnice por la pérdida de valor y de uso de sus móviles antiguos.
Por su parte, Apple se ha escudado en que esta actualización es necesaria, ya que “reduce las interrupciones inesperadas” y adecúa los requisitos de las baterías degradas por el tiempo evitando “apagones”.
Fuente: ABC.
