La organización Human Rights Watch instó este jueves al Gobierno chino a poner fin a los tratamientos para cambiar la orientación sexual que actualmente se llevan a cabo en hospitales públicos y privados del país y que son ilegales, según un informe que presentó la organización en Hong Kong.
El documento, de 52 páginas, bajo el título “¿Ha considerado la felicidad de sus padres? Terapia contra las personas LGBT en China”, recoge el testimonio de 17 personas que fueron sometidas a terapias forzadas para “convertirlos” en heterosexuales entre 2009 y 2017.
Las entrevistas describen cómo la mayor parte de ellos, de entre 15 y 35 años de edad, fueron llevados a las instalaciones médicas, 15 de ellos en centro públicos, por padres y familiares y sin que “ninguno diera su consentimiento” para participar en los tratamientos, dijo la ONG.
Los testimonios revelan el uso de descargas eléctricas, medicación forzada, confinamiento involuntario, abusos verbales y discriminación como prácticas comunes empleadas durante las sesiones.
Fuente: El Tiempo.
