“Me huele a que están cobrando al crimen organizado y no están respetando acuerdos”, en el mundo de las especulaciones y declaraciones extraoficiales, eso fue lo que exclamó un Capitán de la Primera Zona Naval de la Secretaria de Marina Armada de México (SEMAR). Mientras que un alto funcionario del Grupo de Coordinación Tamaulipas (GCT), aseveró “algún mal arreglo y de este modo pretenden suavizarlos”. Lo único cierto es que el Instituto Nacional de Migración (INM) está en la mira de fuego del crimen organizado que opera en esta entidad del noreste de México. Tres cárteles se pelean la plaza y la capital tamaulipeca está bajo una lluvia de plomo.
Los latinoamericanos encuentran en Tamaulipas, la ruta más corta hacia los Estados Unidos; las ciudades fronterizas de Nuevo Laredo y Reynosa, los cruces naturales de los indocumentados que buscan el sueño americano; mientras que el Instituto Nacional de Migración (INM) instala retenes en las carreteras, centrales áreas y de autobuses para frenar el paso ilegal de migrantes como el mismo tráfico de personas, tal vez por eso las camionetas oficiales del INM, están siendo baleadas e incendiadas por los grupos de poder.
El sábado por la tarde, inexplicablemente una camioneta oficial del INM, fue abandonada en una brecha que conduce a la carretera rumbo a Soto la Marina, una ciudad costera de Tamaulipas, pero la unidad fue localizada ya como fierro viejo, pues le habían prendido fuego, sin embargo no hay quien desmienta que los oficiales que tripulaban el vehículo marca Toyota, tipo minivan, de la dependencia federal, hayan sido raptados, tampoco se ha notificado sobre el día y cómo fue que se la apoderaron los grupos delictivos.
Han pasado tres días y la oficina dependiente de la Secretaria de Gobernación (SEGOB) no he emitido un comunicado al respecto, solamente se sabe que la camioneta fue abandonada en una brecha cercana al ejido El Carmen, perteneciente al municipio de la Villa de Cruillas.
Pero mientras el hecho de la unidad incendiada parecía que fue un evento aislado. La madrugada del lunes en la cuidad de Tampico al sur de Tamaulipas, un grupo de civiles armados, abrieron fuego contra otra camioneta del INM cuando se encontraba estacionada al exterior de la oficina ubicada en el centro de la ciudad.
La agresión a la unidad se registró cerca de las 00 horas con 45 minutos del lunes, pero por alguna extraña razón, llámele miedo o precaución, los trabajadores de la oficina federal, reportaron los hechos a la Procuraduría General de la Republica (PGR) hasta las nueve de la mañana y de este acontecimiento, tampoco se ha emitido información alguna.
Particularmente las dos camionetas atacadas, son las que utilizan los oficiales de migración para trasladar a los indocumentados rescatados o retenidos en su pase por Tamaulipas, incluso en la Secretaria de Seguridad Pública del Estado, se tienen expedientes en los que se asentó, que en las últimas dos semanas, al menos unos cinco indocumentados han logrado escapar de la autoridad migratoria mientras procesaban sus datos.
Hay quien considera que estos ataques son solo una “advertencia” y lo peor está por venir.