Hasta el momento, todo les ha salido bien a los alcaldes de la zona sur en el primer mes de gobierno, sin embargo habrá que esperar en el segundo quien será el primero en levantarse en contra de alguna propuesta.
A partir de esta fecha, quienes invirtieron en las campañas, ya sea trabajo o dinero, evaluarán si se cumplieron los compromisos prometidos y también empezará el jaloneo si es que no se dieron las posiciones que se pretendían.
La desesperación de quienes no tienen lo que pidieron, empezará a causar una mayor inquietud y se moverán los asesores para meter puya en donde sea necesario para obtener una ganancia especial para tales o cuales.
Se demostrará también la habilidad política de quienes tienen el mando, para deshacer los nudos que se formen a raíz de estas inquietudes de la gente que está en espera de aquellos puestos que no se han desocupado todavía o que aún no son ocupados.
Mientras eso ocurre ya sea en público o en lo privado los alcaldes andan en lo suyo trabajando al 200%.
ANDRÉS ZORRILLA, en Ciudad Madero es todo un ejecutor. Sigue con la política promocionada por el gobernador FRANCISCO GARCÍA CABEZA DE VACA, mucho contacto con la gente, ser empático con ellos y entender sus necesidades.
Definitivamente es un acierto, el que se coloque una Delegación Norte en Ciudad Madero, además de un módulo de atención ciudadana en la colonia Miramápolis, en donde ya realizó un recorrido para establecer las acciones para restablecer la colonia y lo mismo hizo en la colonia Revolución Verde, sectores olvidados por las anteriores administraciones.
En Tampico, Magdalena Peraza Guerra, sigue con sus actividad intensa desde temprana hora, atiende a todos los sectores de la sociedad y va a todas.
La alcaldesa sabe su oficio y logró eficientar costos realizando obras y acciones con recursos propios.
Seguramente en los próximos días en Tampico se dará la noticia de los nombre de regidores que pidieron y se les otorgaron préstamos del erario público, como si fuese una casa de préstamo, y en los que hay quienes se fueron sin pagar los mismos.
En Altamira, Alma Laura no ha puesto en marcha obra pública, porque prepara un gran paquete que traerá beneficios claros y tangibles a los ciudadanos.
Mientras tanto realiza acciones de gobierno que tienen que ver con estar cerca de las personas, atenderlos y darles solución.
