En el cambio de gobierno los alcaldes salientes dejan broncas

Menudo compromiso tendrán los nuevos alcaldes del sur de Tamaulipas, en este proyecto de gobierno en el que deberán presentar un verdadero cambio a la ciudadanía, responsabilidad que se complica más con todas las broncas que les dejan los que ya se van.

Desde este momento se puede decir que nadie de los que llegará se meterá en problemas, si tienen que soltar lastre lo harán sin miramientos, sobre todo si se trata de alcaldes que llegaron con el Partido Acción Nacional (PAN), como Andrés Zorrilla y Alma Laura.

Gustavo Torres Salinas

Por una cuestión de lógica, no tendrán empacho en señalar las irregularidades que se detecten, el terrible endeudamiento en el que dejan las Administraciones Municipales, una total ineficiencia de la Administración Municipal y más asuntos que pueden salir en el camino.

Magdalena Peraza Guerra

Pero eso en lo que corresponde a quienes llegan por el PAN en sustitución del Partido Revolucionario Institucional (PRI), pero la más difícil la tiene Magdalena Peraza Guerra.

Mario Alberto Neri Castilla

Aunque dependerá de la decisión del Tribunal Federal Electoral, si la ratifican como alcaldesa electa, vamos a tocar el tema como que ya se confirmó, pues es difícil que se decida un nuevo proceso electoral como piden los panistas de Tampico.

Andrés Zorrilla Moreno

La maestra Magda Peraza, tendrá la decisión de juzgar el trabajo de Gustavo Torres, que le deja broncas con los mercados, el Canal de la Cortadura, obras mal aplicadas, deuda millonaria. Tendrá que demostrar que fue digna del voto ciudadano y sacar de la manga un as que le ayude en su reelección de 2018. Porque todos los alcaldes buscarán la reelección, no solo ella.

Hay que recordar que ya pagó el ex alcalde Oscar Pérez Inguanzo, una de las decisiones de Magda, por lo que en esta ocasión pudiera ocurrir lo mismo.

Armando López Flores

De Ciudad Madero, qué decir de alcaldes que siempre les valió la ciudad, sin preocuparse de nada y que dejaron al municipio sumido en un retraso en servicios y obras de 25 años.

Altamira, con un crecimiento desordenado, deuda y con un alcalde que siempre dijo que no tenía dinero, gobiernos miserables, son los que se tuvieron.

Alma Laura Amparán

Ese es el verdadero compromiso de los alcaldes que llegan, que dejen de ser miserables con su municipio y con los ciudadanos y que obliguen a los regidores a trabajar por mejorar el entorno social, que apliquen la poca orientación que reciben en los cursos a los que los llevan.

No se necesita ser un gran político para saber las necesidades de tu propia comunidad, lo que se necesita son ganas de hacer las cosas.