Tras la mala cosecha en Nueva Zelanda de aguacates y la alta demanda del fruto ha ocasionado robos en muchas granjas de cultivos en el país.
Actualmente la venta de aguacates se ha convertido en una manera fácil y rápida de hacer dinero ya que el precio de cada aguacate es entre 2 y 3 dólares.
La directora ejecutiva del New Zealand Avocado Council, Jen Scoular, ha explicado que desde enero han tenido lugar 40 robos en la isla norte, esto puede provocar un posible problema a la salud ya que muchos de esos frutos no están maduros o están rociados con pesticidas.
Fuente: PlayGround