Suiza inauguró el túnel ferroviario más largo del mundo, se encuentra en San Gotardo y mide 57 kilómetros.
Al evento acudieron el presidente de Suiza, Johann Schneider, la canciller de Alemania, Angela Merkel, el presidente de Francia, François Hollande y el primer ministro de Italia, Matteo Renzi.
El objetivo de esta obra que duró 17 años en construcción, es de aumentar el uso del ferrocarril y descongestionar las carreteras para el tráfico de mercancías.
La construcción del túnel ferroviario tuvo un costo de 11,100 millones de euros que salieron del presupuesto público, señaló Schneider.
Los líderes abordaron un tren que los llevó de la entrada norte, en Erstfeld, hasta la salida en Bodio, ubicada en el sur.
“¡Qué pasen los trenes!”, dijo el presidente suizo en las cuatro lenguas (alemán, francés, italiano y romanche).
Hollande destacó la obra al mencionar que su país tiene una admiración por las grandes construcciones: “Hoy Francia, donde se tiene una especial admiración por las grandes obras, se inclina ante Suiza”.
Los recorridos regulares de la vía iniciarán en diciembre, se prevé que crucen el nuevo túnel una cantidad de 260 trenes de mercancías a una velocidad de 100 km/h y 65 trenes de pasajeros con velocidad máxima de 200 km/h.
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