Altamira Tamps.- La sequía ha provocado la muerte de por lo menos 50 cabezas de ganado en lo que va del año en Altamira, mientras que dos mil presas están a un 40% de su capacidad y 600 están secas.
El presidente de la Asociación Ganadera Mártires del Agrarismo, José Luis Padrón Chavarría detalló que las condiciones climáticas han sido adversas para la ganadería y prevé que la muerte de semovientes se volverá un problema crítico en el sur de Tamaulipas.
Refiere que la muerte de ganado se suscitó en ejidos como Providencia y Naranjos, ejido La Gloria, Amalia Solorzano, Santa Juana y Mariano Matamoros.
«Son los ejidos que se dedican más a la ganadería, aunque el problema es en toda la zona rural, pero en estos son los que tienen más probabilidades de que haya muertes».
Puntualizó que la mayoría de las presas están por debajo del 50%, «no tienen agua suficiente y esto representa un riesgo para los animales que entran a tomar el agua porque pueden quedarse atoradas».
«Estamos calculando que hay en la localidad mil 200 unidades de producción y a lo mejor estamos hablando de dos mil presas en la zona y de las cuales el 30% están secas (…) hablamos que 50 ganaderos han sido afectados por la sequía en este año».
Padrón Chavarría agregó que el ganado no tiene buenas condiciones corporales, «en la asociación tenemos 83 productores y de estos el 50% reciente las consecuencias por la falta de lluvias y debido a ello algunos han abandonado la actividad».
«No tenemos el hato ganadero que antes se tenía, ahorita calculo que hay siete mil cabezas de ganado en Altamira y de estas el 80% presenta un bajo peso, eso es un riesgo».
