Estados Unidos.- El general Campbell afirma que el bombardeo, que causó 22 muertos, fue solicitado por las fuerzas afganas. Aunque advierte de que hay una investigación interna todavía abierta.
«Nunca atacaríamos de manera deliberada una instalación médica protegida», manifestó el general John Campbell, comandante en jefe de las fuerzas estadounidenses y de la OTAN en Afganistán. Campbell, admitió este martes (06.10.2015) que el ataque del fin de semana contra un hospital gestionado por Médicos Sin Fronteras en Kunduz que provocó la muerte de 22 inocentes fue un error.
«Fue una decisión estadounidense tomada dentro de la cadena de mando de Estados Unidos», aclaró el general, aunque a petición de las fuerzas afganas. Campbell añadió que hay una investigación abierta sobre el bombardeo. El general de cuatro estrellas abogó por mantener la presencia de tropas en Afganistán, que «sigue siendo una de las regiones más peligrosas del mundo», ante los nuevos ataques de los talibanes.