Tampico Tamps.- Ahora que la noticia mundial acaba de ser aquella que dio el Papa Francisco hace unas horas, en el sentido de que el trámite para que la iglesia católica considere nulo un matrimonio deberá ser más ágil y estar al alcance de todos mediante su gratuidad, en Tampico la Diócesis porteña da la nota este jueves: resulta que, según respondió la autoridad eclesial a preguntas específicas en una rueda de prensa, la infidelidad no es necesariamente una causal por la que pueda declarase la nulidad del sacramento de la iglesia mediante el cual dos personas unen sus vidas.
La conferencia informativa había sido para anunciar la edición número 24 de la Ultreya Nacional, y en la sesión de preguntas se le empezó a inquirir al obispo José Luis Dibildox sobre el tema de las separaciones dentro del catolicismo, y aparte de aclarar que se trata de anulación del estatus ya citado, es decir, del casamiento, y no de un divorcio, explicó que en efecto en lo sucesivo, y por instrucción papal, deberá de agilizarse y ser gratuito, pero siempre bajo la consideración de causales que para ello están claramente determinadas, y nunca promoviendo la desintegración del vínculo entre los cónyuges y mucho menos, dijo, la desintegración familiar.
«No se trata de promover la desunión… hay casos que son muy evidentes, como dice el Papa, y esos el obispo los va a resolver… Efectivamente, el santo padre quiere que todo se haga más rápido, agilizar, pues, los trámites, y así va a ser… hay casos en los que se da la nulidad desde el principio», precisó el jerarca clerical.
Dibildox enumeró algunas causales consideradas por la iglesia, como cuando se ha obligado a casarse a una jovencita que quedó embarazada, o a quien así la dejó, siendo ambos solteros, y también aplica, señaló, cuando ha habido engaño por parte de alguno.
Además, mencionó que si alguno de los que conforman la pareja de marido y mujer se niega expresamente a procrear y rechaza tener hijos, aunque el matrimonio religioso haya sido legítimo, existe y se da la causa para considerar nulo ese sacramento.
En contraste, ya al término de la rueda de prensa pero antes de que se levantaran de su lugar el obispo y sus acompañantes, entre ellos monseñor Alfonso Ramírez Luna, párroco de la iglesia Nuestra Señora del Rosario, éste comentó, en tono hasta divertido, que no habría gente que quisiera casarse si la infidelidad fuera una causa para declarar nulo un matrimonio.
