@dect1608
Roberto Ramírez de la Parra, Director General de la Comisión Nacional del Agua (Conagua) demostró ser un completo ignorante de los asuntos de intereses de la Conagua en México. En una visita de trabajo por Tamaulipas, realizada este jueves, Ramírez, apenas y pudo deslindar al organismo federal del proyecto Monterrey VI, argumentando la realización del acueducto, “corresponde” al Gobierno del Estado de Nuevo León, que a partir de Octubre, estará a cargo de Jaime Rodríguez, alias «El Bronco”.
“Como seres humanos siempre seremos susceptibles a equivocarnos, pero debemos tener la valentía de aceptarlo, ofrecer disculpas y asumir las consecuencias de ello”, habría expresado, David Korenfeld, tras renunciar a la titularidad de la Conagua, luego de que se difundieran las fotografías en las que él y su familia hicieron uso de un helicóptero oficial para disfrutar los fines de semana.
La tragedia de Korenfeld, se convirtió de inmediato en la alegría y oportunidad de oro para Rodríguez de la Parra, sin embargo en una gira fugaz por Tamaulipas, demostró que es un completo neófito en la materia.
Luego de que los representantes de los Medios de Comunicación, tuvieron que plantarse frente a Roberto Ramírez, para que no caminara más y respondiera las preguntas relacionadas al polémico, Monterrey VI, el funcionario no supo “defender” el ambicioso proyecto hidráulico, su capacidad apenas le dio para decir, “lo tiene que definir el Gobierno del Estado de Nuevo León, no la Comisión Nacional del Agua, es un proyecto que no corresponde a la Comisión Nacional de Agua» y así pudo salir del paso, luego de que se le insistió una y otra vez explicara el status de esta controvertida obra.
Pero antes de que pudiera responder, tuvo que ignorar los cuestionamientos argumentando que debía sostener una reunión privada con el Gobernador, Egidio Torre Cantú, encerrona a la que nadie pudo ingresar con sus teléfonos móviles y fueron entregados al asistente del titular de la Conagua, fue allí adentro como de la Parra, puso en orden sus ideas y al salir luego de 60 minutos, respondió sin poder decir más.
Previo a la reunión con el mandatario estatal en la ciudad de Altamira, se le pidió a Roberto Rodríguez, hablará acerca de los proyectos que tiene la Conagua para aprovechar el agua de lluvia ya que las sequias son cada vez más severas y las precipitaciones, además de causar severas y mortales inundaciones, bien podrían ayudar el campo tamaulipeco. Al menos en la región sur, se tienen más de tres mil hectáreas donde mayormente se siembra: Sorgo, cártamo, maíz y hortalizas de chile, tomate y cebolla. Otros que no verían mal un proyecto que obtenga los mayores beneficios a las lluvias, son los ganaderos que en la temporada de sequía cuentan sus vacas flacas y cadavéricas cabezas de ganado; pero de esto, tampoco respondió nada, Roberto Ramírez de la Parra, dejando una clara evidencia de su incompetencia.
El hombre que llegó en abril pasado para ocupar el puesto de David Korenfeld, apresurado se subió al camión del Gobierno de Tamaulipas, para continuar con la agenda de trabajo; allí, alejado de los medios de comunicación estaría más seguro, pero horas más tarde, tendría que enfrentarse de nueva cuenta con los reporteros en la ciudad de Tampico, ciudad en la que se le preguntó si existe el interés por proteger el sistema lagunario que abastece de agua potable a los municipios conurbados de Altamira, Madero y Tampico; y esto debido a que a escasos metros del cuerpo de agua, viajan cientos de camiones con productos químicos altamente peligrosos, hacia el Puerto Industrial de Altamira y para ejemplo, un botón, tres días antes, una pipa con Diesel, derrapó y vertió combustible a la laguna del Chairel, aquí lo más fácil para de la Parra y su equipo de trabajo fue “taclear” a la prensa, para abrirle paso rumbo al camión mientras el gobernador, aprovechaba para tomarse algunas fotografías con las líderes de colonias que en él confían.
Roberto Ramírez de la Parra, nuevamente guardo silencio y salió corriendo como niño en busca de su mamita para que lo protegiera de los cuestionamientos básicos, simples y obligados de una región que prácticamente vive en un archipiélago y lo menos que debe hacer es cuidar el agua y aprovechar la misma que le cae del cielo porque en los próximos meses le estaremos hablando de sequía extrema e inundaciones funestas como en otros años ha sucedido.
Foto: El Regio