Norte de Veracruz.- Las carreteras del norte de Veracruz, en el municipio de Pueblo Viejo, son paso obligado para transportistas de carga pesada. Dicha ruta, totalmente destrozada con zanjas de hasta un metro de profundidad, deja testimonio del desinterés de los gobiernos estatal y local, para ayudar a poseer mejores vías de comunicación con los estados hermanos como Tamaulipas y San Luis Potosí.
Esto es plataforma para muchos políticos que en campaña aseguran que bajarán recursos o invertirán millones de pesos para mejorar los accesos, quedando simplemente en el discurso, jamás en la acción.
La regidora de Tampico, Aura Giovanni Del Ángel, explica: “No contamos con unas carreteras de calidad, y disminuye en gran medida el comercio terrestre, porque el hecho de estar pasando por ahí constantemente pues obviamente afecta en tiempo y dinero, y esto obviamente demerita los ingresos de los comerciantes locales y en un momento dado lo que pudieran venir como comerciantes nacionales pues a la zona, por la dificultad de llegar a la región”.
Pasar por esta parte de la república mexicana incrementa los gastos de operación para el sector transporte de carga, por el tiempo que se pierde y por el daño que sufren las unidades en llantas y sistema general.
“Creo que es muy viable realizar algún tipo de reunión con las autoridades municipales y estatales, y que también se integren los diputados federales en este ámbito para poder darle una solución inmediata y resolver… vemos ambas carreteras, tanto por la entrada a Ozuluama como por la llegada a Valles, las carreteras entradas por Tampico, toda la vida desde que yo recuerdo, están en construcción, en proceso de remodelación”.
Autoridades del sur de Tamaulipas urgen la necesidad de que sus homólogos de Veracruz, a nivel local, estatal y con autoridades federales se reúnan para crear estrategias que lleven a la reconstrucción de estas carreteras, hoy convertidas en trampas tanto para los automovilistas como para el desarrollo de la zona.
Quizá sea más tiempo, pero en los últimos 20 años las carreteras en el norte de Veracruz no han tenido un desarrollo real, manteniendo esta parte del estado prácticamente en el olvido.
Lo triste de la historia es que los futuros candidatos nuevamente la tomaran como bandera política.
