“Tanto tiempo disfrutaron el robar…
En nuestras caras se burlaron, tanto así..
Que todos guardan, ya, sabor a PRI”, léase en la entonación de ese romántico bolero Sabor a mí, del compositor Álvaro Carrillo, interpretado por Luis Miguel.
Y es que hace apenas unas 48 horas que la candidata del oficialismo, Claudia Sheinbaum Pardo para justificar la catástrofe gubernamental de Andrés Manuel López Obrador, declaró desde Torreón, Coahuila, que el Partido Revolucionario Institucional (PRI), se robó hasta las medicinas.
«El PRI históricamente se ha robado todo, hasta las empresas en la época neoliberal, por eso hay que votar por la transformación este 2 de junio», declaró la doñita de la coleta de caballo.
Pero siguiendo en la fábula de ese bolero que en 1960 se convirtió en la canción más exitosa en México y la historia del tricolor; es fácil percibir que Claudia Sheinbaum, también lleva sabor a PRI.
¡Claro!
Si a la candidata de Morena se le ocurriera negarlo, basta con recordarle el origen de su mesías tabasqueño; que el PRD, partido en el que participó como fundadora fue inspirado por expriístas, es más, que la fórmula de candidatos al Senado de la República en Tamaulipas, es encabezada por Olga Patricia Sosa Ruiz, candidata suplente del PRI con José Francisco Rábago Castillo, después candidata del PRI al Congreso local y diputada por ese mismo partido, quien por estrategia servil al gobernador Egidio Torre Cantú se cambió al Partido Verde Ecologista de México, ah, por cierto, el ahora personaje que abandera la fórmula del Verde a la misma cámara alta es ni más ni menos que el polémico exgobernador tamaulipeco Eugenio Javier Hernández Flores, sí, uno de los exmandatarios priístas encarcelados y hoy es pieza clave para el “Plan C”, que ella misma pregona.
Claudia, que ahora actúa como una sinvergüenza, vociferó al estilo de una candidata desesperada, como si sus números fueran a la baja o ya no tuvieran ese acelerado crecimiento ante una X, que caminando sigue dando de qué hablar.
Claudia Sheinbaum, por mencionarle solamente a Olga Sosa y Eugenio, ambos candidatos al mismo cargo, pero si seguimos en un recorrido por el resto de las candidaturas, se vuelve loca… bueno, con decirle que si llegara a regresar a Tamaulipas, y analiza a sus compañeros a los diversos cargos de elección, seguro terminará pidiendo el voto a la Alianza PAN-PRI-PRD porque en esos partidos políticos siguen los que nunca han sido juzgados, ni investigados por malos manejos, contrario a sus candidatos en Morena.
Claudia: “Si negaras su presencia en tu vivir…
Bastaría con abrazarte y conversar…
Tanta vida te da hoy su corrupción…
Que por fuerza tienes ya…
Sabor a PRI”.
En la intimidad… ¡Póngase seria señora! Y pónganse serios los morenistas de Tamaulipas, que si quieren que Claudia gobierne el país ocupa más que esos dichos absurdos, tengan presente y muy claro que sólo al Peje le bastó con decir estupideces para llegar a la presidencia, y en mucho fue porque ustedes los expriistas hartaron al electorado, sí, ese mismo que tienen con un dedo en la boca.
“No pretendo ser tu dueño…
No soy nada, yo no tengo vanidad…
De mi vida doy lo bueno…
Soy tan pobre, ¿qué otra cosa puedo dar?”.