Miles de habitantes y visitantes disfrutaron de las
fiestas patronales de San Antonio de Padua.
Ciudad Victoria, Tamaulipas.- El pueblo mágico de Tula,
ubicado en la zona del altiplano tamaulipeco, se caracteriza por conservar y
promover sus costumbres, tradiciones y valores. Muestra de ello, fueron las
celebraciones del santo patrono de la ciudad, San Antonio de Padua, en las que
miles de devotos e integrantes de 40 cuadros de danza resaltaron la importancia
de esta fecha especial.
Tula es el municipio con más historia de Tamaulipas,
cuenta con 402 años desde su fundación el 22 de julio de 1617, siendo realizada
esta acción por el fraile franciscano Juan Bautista de Mollinedo, quien llegó a
la región bajo la misión de San Antonio.
Las actividades para festejar al santo patrono de Tula
comenzaron con la celebración de una solemne misa en el atrio de la iglesia,
donde ante miles de feligreses el obispo de la Diócesis de Ciudad Victoria,
Antonio González Sánchez, compartió un mensaje de unión y de valores en
familia.
Una característica que distingue esta fecha es la
presencia de música y baile. Durante todo el día se realizan danzas típicas
regionales, que se relacionan con los españoles y el tema de la conquista, y
que son apreciadas por los turistas que acuden a este pueblo mágico durante las
celebraciones.
Las danzas de pie se caracterizan por la participación al
frente de una o dos niñas vestidas de blanco, representando a la Malinche,
bailando también un joven que lleva consigo una sonaja y una macana, el cual
lleva por nombre Monarca, siendo su función dirigir la evolución de los pasos.
Los danzantes usan una corona elaborada con vara de raíz,
asemejando la cúpula principal de la iglesia, adornada flores y con 4 espejos
que representan los puntos cardinales, también utilizan listones de múltiples
colores. Su indumentaria está elaborada en satín y calzan huaraches con
correas, elaborados en esta ciudad.
Traen cascabeles, mazo y sonaja con los que acompañan
alguno de los 138 sones que existen, comenta Salvador Piña Miranda, cronista
adjunto del municipio de Tula, Tamaulipas.
Otra de las modalidades son las danzas a caballo, donde
el armazón es de carrizo o de otate, forrado con costal de yute, espejos,
artículos utilizados por los campesinos, la escobetilla para peinar al corcel,
cascabeles, pañuelos y flores. Este baile se completa con la representación de
un toro y una mula.
Este tipo de danzas son características de Tula,
participando familias completas y comenzando los niños con esta tradición desde
temprana edad, debido a su importancia para la comunidad, también se bailan el
3 de mayo, día de la Santa Cruz, y el 12 de diciembre, en la celebración de la
Virgen de Guadalupe.
Por la noche, la gente asiste a la verbena popular que se instala en la plaza principal del municipio, donde se disfrutan diferentes platillos típicos, así como adquieren artesanías y productos locales, apreciando además espectáculos como la quema de fuegos artificiales, que marcan el fin de las festividades.